Estuve saboreando existencia desde la mañana
El gusto amargo de la primera hora
Como si pudiera zafarme de la vida
Como si hubiera muerto mientras dormía
Y pierdo horas de existencia conciente
Cuando afirmo que vivo y me angustio
Quién me juzga si perdí medio día
Apropiándome de mi existencia hecha cuerpo?
Desde que sentí el peso de mis huesos sobre la cama
El dolor de mi cabeza en la almohada
Y los pies arrastrándose hacia la puerta
En la que nadie golpeó
Ni nadie vino
Nunca
Ninguna vez
Nadie vino a mi puerta